Vodafone iniciará en breve una serie de experiencias piloto en el Reino Unido con tecnología de redes de radio abiertas (Open RAN), con el fin de poder utilizar en el futuro equipos y estaciones base estandarizadas de distintos fabricantes. El operador ya ha probado la tecnología en Turquía y Sudáfrica y, si la experiencia en áreas rurales del Reino Unido es satisfactoria, la ampliará a distintas redes que tiene en Europa. El mes pasado, NTT DoCoMo demostró la interoperabilidad de estaciones base 4G y 5G de Fujitsu, NEC y Nokia que utilizaban las especificaciones comunes a todos los fabricantes aprobadas por la Open RAN Alliance.
Vodafone está preocupado por el escaso número de fabricantes capaces de asegurar un elevado y rápido despliegue de redes móviles, tanto 4G como 5G. En la práctica, existen tres grandes fabricantes (Huawei, Ericsson y Nokia) que ya se repartieron la gran mayoría de los contratos 4G y ahora ocurre lo mismo con 5G, aunque otras compañías, principalmente Samsung, ZTE y NEC, pugnan por introducirse más a nivel internacional. El veto de Estados Unidos a que las operadoras de su país instalen productos de Huawei y se quiera imponer la prohibición en otros países no ha hecho más que agravar la situación, porque existe el riesgo de fragmentar el mercado 5G en dos bloques enfrentados entre sí.
La perspectiva de que se alcance una solución satisfactoria para todos a corto plazo en este tema y en el más general de la guerra comercial que mantienen Estados Unidos y China es, cuanto menos, difusa. Si persiste la prohibición a que los fabricantes estadounidenses vendan chips a Huawei y la compañía no logra suficientes suministradores alternativos, Vodafone y los otros operadores que han optado en gran medida por instalar equipos de Huawei, especialmente para las redes 5G, podrían verse acorralados.
El responsable de tecnología de Vodafone en el Reino Unido, Scott Petty, ha asegurado que prohibir la instalación de equipos de Huawei en su red supondría a su compañía un retraso de dos años en su estrategia de implantación de redes 5G y un gasto de miles de millones de libras en el cambio. Los equipos de Huawei están instalados en el 32% de las 18.000 estaciones base con que cuenta Vodafone en el Reino Unido, mientras que Nokia y Ericsson suponen el resto. En otros países europeos, como Alemania, Francia, Italia o España, la cuota de mercado de Huawei es del mismo orden, con tendencia de los equipos de Huawei al alza en los nuevos contratos de suministro.
Se busca incrementar la resiliencia de la cadena de aprovisionamiento, dando entrada a una nueva ola de suministradores 2G, 3G, 4G y 5G
También se duda de que Ericsson y Nokia puedan asumir mayor cuota del mercado 5G si los suministros de equipos de red de Huawei se vieran finalmente comprometidos por falta de componentes, una hipótesis que la compañía china ha negado al asegurar que ya disponen de proveedores alternativos a los chips de compañías estadounidenses. Todos los expertos reconocen que Huawei cuenta con una buena red comercial con numerosos especialistas sobre el terreno, facilita líneas de financiación atractivas y sus equipos de red tienen una excelente relación entre calidad y precio.
Estas características hacen que Huawei sea muy competitiva respecto a sus rivales y explican su éxito creciente a nivel internacional, especialmente en las nuevas redes 5G. A su vez, alarma a los estrategas de la Administración estadounidense, que ven cómo no tienen ninguna compañía capaz de fabricar equipos de red y hacer frente a Huawei en particular y China en general en materia de redes de telecomunicaciones avanzadas. La última compañía que tenían, Lucent, se fusionó hace años con la francesa Alcatel y finalmente ha sido absorbida por Nokia, que también se quedó con los activos de telecomunicaciones de Siemens.
La apuesta de Vodafone de promover el desarrollo y producción de equipos de red basados en un estándar abierto e interoperable como Open RAN, con independencia del fabricante, tiene así pleno sentido, porque reduce el riesgo de verse atrapado por un número muy limitado de suministradores y, al menos en teoría, bajar los costes a consecuencia de una mayor oferta y el uso de economías de escala. En un comunicado, Vodafone sostiene que su iniciativa mejorará “la resiliencia de la cadena de suministro” e introducirá “una ola de nuevos proveedores de tecnología 2G, 3G, 4G y 5G” a la actual oferta.
Las especificaciones Open RAN llevan años gestionándose, pero fue en octubre del año pasado, en una cumbre de la Telecom Infra Project (TIP) dedicada a mejorar la eficiencia de las redes de acceso a radiocomunicaciones (RAN) y la utilización de hardware común y comunicaciones centradas en el software cuando tanto Vodafone como Telefónica mostraron su público apoyo a la iniciativa Open RAN. En el pasado MWC, Telefónica reiteró su firme apuesta por la construcción de redes de telecomunicaciones basadas en el software, ubicadas en la nube, virtualizadas y con independencia de los fabricantes de equipos, para así poder migrar recursos de red de un sitio para otro según las necesidades. Una estrategia que forma parte del núcleo de la iniciativa de Open RAN y que también comparten muchos de los grandes operadores internacionales.
Vodafone está satisfecha con las pruebas realizadas y se declara a punto para desplegar Open RAN rápidamente en Europa