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Los suministradores tradicionales confían en controlar las redes Open RAN

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El desarrollo de la tecnología de redes de enlace abiertas (Open RAN) avanza a buen ritmo, aunque su implantación no se prevé inminente ni mucho menos generalizada, sino apta para aplicaciones de nicho. Los suministradores tradicionales, en especial Nokia pero también Ericsson, quieren quedarse con una parte muy importante del nuevo negocio de redes “abiertas”, mientras otras grandes compañías de equipos de telecomunicaciones, como NTT DoCoMo y Samsung, aspiran a conquistar gran parte del resto, dejando muy poco mercado para los pequeños suministradores de redes Open RAN.

 

Para complicar más el panorama, los actuales propietarios de patentes 5G pretenden hacer valer sus derechos en los interfaces RAN supuestamente ya estandarizados por el 3GPP, como X2, y cobrar peaje, como temen algunos suministradores alternativos, como Parallel Wireless o Mavenir, entre los más conocidos. Otra cuestión candente es que pueden coexistir, cuando finalmente se desarrollen, múltiples tecnologías RAN “abiertas”, no necesariamente compatibles entre sí, y convertirse en una pesadilla para los operadores. Sin mencionar que a las redes de telecomunicaciones gestionadas “in situ” se sumarán las redes virtualizadas y las basadas enteramente en la nube, con una amalgama de alianzas entre múltiples suministradores de hardware, software, aplicaciones y operadores.

 

Las redes de telecomunicaciones siempre han funcionado en modo ecosistema, con operadores de ámbito estatal o regional que prestaban el servicio en base a estrictas regulaciones internacionales y nacionales y licencias concedidas para el uso del espectro radioeléctrico. Estos operadores, a su vez, estaban soportados por una pléyade de suministradores de sistemas, equipos, software y componentes, que competían a nivel nacional y crecientemente internacional, con la única e importante limitación que impone que todo debe ser compatible y, evidentemente, que las comunicaciones traspasen cualquier frontera entre países o de tecnología, tanto en telefonía fija como móvil.

El desarrollo de la tecnología de redes abiertas Open RAN avanza, aunque la complejidad del tema y los múltiples aspectos relacionados hace que por ahora sea imprevisible su disponibilidad en redes extensas

La aparición de poderosos operadores alternativos de telecomunicaciones, los llamados Big Tech, con ingentes recursos económicos y un alcance global, que sobrepasa las tradicionales fronteras nacionales, sumado a la aparición de nuevas tecnologías de comunicaciones basadas en la nube y en la virtualización, así como la convergencia de redes fijas, móviles y dentro de poco satelitales, plantea un escenario extremadamente complejo, sin olvidar la mayor intromisión de la política nacionalista en los organismos que, hasta ahora, eran mayoritariamente empresariales y con vocación claramente tecnológica e internacional.

 

El veto de Estados Unidos a los equipos de Huawei, su interés estratégico en volver a fabricar equipos de telecomunicaciones propios y el virtual monopolio de los gigantes tecnológicos estadounidenses en temas clave, por mucho que se tema el avance de China, está provocando que las distintas regiones del mundo compitan entre sí para no perder posiciones. Un ejemplo es la aparición de Open RAN, encaminada a romper el actual statu quoen equipos y redes de telecomunicaciones, controlado en más de tres cuartas partes por Ericsson, Nokia y Huawei.

 

En 2020, el Gobierno británico ordenó que, a más tardar a finales de 2027, los operadores de telecomunicaciones del Reino Unido dejaran de tener equipos de Huawei en sus redes, lo que afectaba directamente a BT y Vodafone, muy dependientes de los equipos del fabricante chino. La tarea no es nada sencilla, porque los equipos ya instalados son útiles durante muchos años y, si se quieren actualizar de 4G a 5G, o se emplean equipos del mismo fabricante o se instala una red completamente nueva y se desaprovecha la existente, sin renovarse.

 

Recientemente, además, Vodafone y BT han reconocido que no es posible apagar 3G a corto o medio plazo, porque existen muchos usuarios dependientes de ella, ni tampoco 2G, porque es necesaria para muchos servicios de itinerancia o de comunicaciones entre máquinas, y mantener los equipos, aunque sean de Huawei, durante muchos años. En cuanto a las redes actuales 4G, se pueden mantener hasta 2027 si son de Huawei, pero sin actualizarlas a 5G, e ir introduciendo la nueva generación móvil con redes más abiertas o que no sean de Huawei (ni supuestamente de ZTE, otro gran fabricante chino).

El recurso de Open RAN

Cuando el Gobierno británico decidió en 2020 sumarse a los deseos de Estados Unidos y vetar a Huawei, una opción que parecía muy factible entonces para no depender de fabricantes chinos era instalar las nuevas de redes con tecnología abierta, Open RAN. Pero han pasado dos años y la tecnología Open RAN continúa siendo factible, pero en fecha más imprecisa y, por el momento, circunscrita a ámbitos muy específicos.

 

Estados Unidos no tiene tantos problemas como el Reino Unido para prescindir de Huawei, porque los grandes operadores no han instalado equipos chinos en sus redes de telecomunicaciones y los operadores regionales, que sí tienen, están recibiendo subvenciones para que los desmantelen (aunque consideran el importe aprobado muy insuficiente y que pone en riesgo su modelo de negocio y el servicio que prestan en amplias zonas rurales). Los operadores regionales estadounidenses, como los europeos, estaban satisfechos con Huawei por su calidad, precio y servicio prestado.

 

En cualquier caso, Vodafone UK hace tiempo que están haciendo diversas pruebas de redes Open RAN para reducir su dependencia de Huawei y acogerse a las ayudas que le concede su Gobierno. Hace justo un mes, puso en marcha cerca de la ciudad de Bath, al oeste de Inglaterra, el primer sitio comercial Open RAN, de los 2.500 sitios 4G y 5G que prevé el operador instalar hasta 2027 con este sistema en el oeste del Reino Unido, donde toda la red funciona con Huawei.

El 1 y 2 de marzo, en el marco del MWC, están previstos dos encuentros informativos sobre la futura evolución de Open RAN, a cargo de eminentes representantes de la industria, al margen de que se hable del tema en distintos stands

Al flamante sitio, o estación de radio, inaugurado le falta sin embargo un ingrediente esencial: la antena. Vodafone decidió el año pasado que los suministradores de las antenas Open RAN serían de Samsung y de NEC, pero aún están en desarrollo y verificar que sean totalmente compatibles con el resto de la red. En un encuentro con los medios de comunicación a principios de 2019, Scott Petty, entonces director de tecnología de Vodafone UK y ahora de todo el grupo, dijo que Huawei había suministrado alrededor de 6.000 de los 18.000 sitios con que Vodafone tiene en el Reino Unido.

 

Queda por decidir, por tanto, qué hacer con los 3.500 restantes, si también dejárselos a Samsung y NEC con Open RAN, o acudir a Ericsson, que en 2019 tenía unos 10.000 sitios, o Nokia, con los 2.000 restantes de la red 4G de Vodafone. Si al final Vodafone acaba en 2017 con 2.500 sitios Open RAN, supondría el 14% de toda la red de Vodafone UK, que tampoco es mucho para la compañía que más apuesta por esta tecnología abierta, como han hecho notar los expertos en telecomunicaciones.

BT prueba con Nokia un RIC Open RAN

Mientras Vodafone UK se ha puesto en materia de Open RAN con NEC, y especialmente con Samsung, BT siempre ha recelado de la bondad de esta tecnología. El pasado noviembre, Neil McRae, director de tecnología de todo el grupo de telecomunicaciones británico, aseguró que “uno de los grandes mitos de Open RAN es que nos ahorrará dinero”. “Lo veo con mucho escepticismo”, añadió, “porque sé lo mucho que cuesta escribir el código de software libre y conozco el precio de los chips de Intel y de los otros fabricantes de componentes L1 alternativos”.

 

En cualquier caso, a pesar de que BT considera que se es demasiado optimista con el futuro de Open RAN y de sus posibilidades y coste, la compañía también asegura que está profundamente involucrado en su desarrollo y en la colaboración con TIP y O-RAN Alliance, las dos organizaciones que coordinan su desarrollo. Quizás para acallar algunas críticas de que es demasiado pesimista con Open RAN, el pasado 26 de enero, unos días después de Vodafone UK, dio a conocer un acuerdo con Nokia para ensayar una solución Open RAN en la ciudad británica de Hull y “mejorar la experiencia de banda ancha móvil”.

 

El acuerdo de BT con Nokia se centra en probar la instalación del RAN Intelligent Controller (RIC) de Nokia para Open RAN en varios sitios de la red móvil de BT (que lleva la marca EE) en la zona, con el fin de optimizar sus prestaciones. Como dice McRae en el comunicado, “el acuerdo de prueba Open RAN con Nokia es una de las muchas inversiones que estamos haciendo para ampliar las prestaciones de la red 4G y 5G de EE y dar mejor servicio a nuestros usuarios”. Entre ellas, el centro de innovación Open RAN que BT prevé inaugurar a finales de año en Adastral Park, similar a los laboratorios que están poniendo en marcha Telefónica, Deutsche Telekom, Orange y Vodafone, los cuatro grandes operadores europeos más involucrados en Open RAN

 

Este acuerdo de BT con Nokia en Open RAN ha puesto de relieve la gran importancia de los controladores inteligentes en las redes de enlace, conocidos abreviadamente como RIC. Y, también, si la inclusión de un RIC Open RAN en una red es suficiente para considerarla Open RAN. Esta RIC de Nokia, que trabajará casi en tiempo real (su nombre completo es Near-Real Time RIC) se utilizará para monitorizar y gestionar hasta ocho sitios de redes RAN 4G/5G de Nokia, en este caso Open RAN, y asegurarse que los interfaces se comunican bien con el resto de la red.

 

La principal aplicación de esta RIC de Nokia será por tanto monitorizar el tráfico de la red y detectar anomalías de funcionamiento. Inicialmente, se utilizará sólo en aplicaciones muy específicas y, además, la propia Nokia reconoce que está aún en sus estadios iniciales de desarrollo. En las pruebas de laboratorio se podrá observar si está lista para su uso en redes reales. El acuerdo con Nokia con redes de enlace 5G se remonta a 2020. Por tanto, para algunos expertos, se trata sólo del primer paso de un largo recorrido antes de ver redes Open RAN en pleno funcionamiento. El hecho de que BT se haya aliado con Nokia demuestra, por un lado, el compromiso de la compañía finlandesa por desarrollar tecnologías Open RAN pero, por otro, que no quiere dejar un flanco abierto para que otras compañías entren en este segmento de negocio, al menos en Europa.

El interfaz X2, embebido en las RAN

Otro tema relacionado con las redes Open RAN que últimamente ha dado que hablar es la situación de X2, un interfaz técnico que hace que las estaciones de radio puedan interactuar y comunicarse entre sí y con la red general. En principio, X2 forma parte de los estándares aprobados por el 3GPP y debería estar disponible suelto, aunque sometido al cobro de licencias de uso.

 

Sin embargo, según John Baker, vicepresidente y encargado del desarrollo de negocio de Mavenir, una empresa estadounidense que desarrolla productos Open RAN, X2 está integrado y forma parte intrínseca de las estaciones base de los fabricantes de redes de enlace, como Ericsson o Nokia. Para Mavenir, se trata de un grave problema, porque no puede hacer partes abiertas de redes de enlace al no tener acceso al interfaz X2, según comentó a la publicación especializada Light Reading. Mavenir también se ha quejado a la FCC, el órgano regulatorio de Estados Unidos en telecomunicaciones, porque “X2 está totalmente especificado pero se mantiene cerrado o bajo licencia”. Unas licencias que Mavenir considera que tienen un precio injustificadamente elevado.

 

Algunos expertos en telecomunicaciones consideran que no se han tenido en cuenta las dificultades que plantea desarrollar una red totalmente abierta. Aparte del interfaz X2, existe otro, el CPRI, que se encarga de procesar y comunicar las señales de radio entre distintas estaciones base. CPRI está especificado por el 3GPP, pero existen lagunas en algunas partes, que los fabricantes de RAN se encargan de llenar y que al final es lo que hace que sean incompatibles entre sí a no ser que sean de un mismo fabricante todo el conjunto.

 

Gordon Brown, analista de la consultora Heavy Reading (y que pertenece a Light Reading) tampoco considera que sea deseable, ni desde el punto de vista comercial ni tecnológico, que haya varios suministradores de redes en una misma área geográfica. En su opinión, los operadores prefieren que el mismo suministrador cubra una amplia área geográfica de su red. Se evitan así problemas de interferencia entre señales e incompatibilidades entre interfaces.

 

Eventualmente, los controladores inteligentes (RIC) podrían controlar las estaciones base de distintos suministradores, sean RAN abiertas o cerradas, y reemplazar las clásicas arquitecturas RAN formadas por equipos de un mismo fabricante y de forma dinámica. Los RIC, en este sentido, son clave para el futuro de la tecnología Open RAN, pero aún están en su estado inicial de desarrollo. Los RIC, aparte, se subdividen en controladores centralizados que no funcionan en tiempo real (C-RIC) y en controladores distribuidos que funcionan casi en tiempo real (D-RIC).

 

Dentro de dos semanas, en el MWC, están previstas dos sesiones para los interesados en profundizar sobre Open RAN. El 2 de marzo, de 12,30 a 13,30 horas en el Hall 5 , se hablará de Open RAN, con los máximos responsables de tecnología en Parallel Wireless, Red Hat, Turk Telekom y John Baker, de Mavenir, y Neil McRae, de BT Group, antes citados. El 1 de marzo, la O-RAN Alliance, aparte de intervenir en distintos paneles, tiene previsto hacer un encuentro informativo de 17,15 a 18 horas en el stand de Deutsche Telekom, en el Hall 3, con el anuncio de su quinta versión. No cabe duda de que Open RAN suscita mucho interés y que serán encuentros con elevada participación de asistentes (aunque muchos virtuales).