China no empezó hasta octubre el despliegue comercial de redes 5G, pero en pocos meses se ha puesto a la cabeza en número de suscripciones y ya cuenta con más usuarios 5G que en el resto del mundo. A finales de febrero, China Mobile, el operador más importante del país, contaba con un total de 15,4 millones de suscripciones 5G, de las cuales 8,66 millones se habían contratado en febrero, un mes donde el país estaba asolado por la pandemia. China Telecom, el segundo operador, alcanzó 10,73 millones de suscripciones 5G mientras que China Unicom, el tercer operador, probablemente logró del orden de nueve millones de suscripciones 5G, aunque no ha facilitado datos pero cuenta con un número de usuarios móviles sólo ligeramente inferior a China Telecom.
A finales de febrero, por tanto, China contaba con cerca de 35 millones de usuarios 5G, una cifra muy superior a la del resto del mundo menos de medio año después de haber iniciado los servicios comerciales. Esta cifra, de todas formas, es reducida respecto al total de usuarios móviles que tiene el país. China Mobile contaba con 942,16 millones de suscripciones móviles a finales de febrero, China Telecom 330,4 millones y China Unicom 310,69 millones. En total, entre los tres operadores nacionales, controlaban 1.583 millones de conexiones al terminar febrero, un poco más de uno por habitante.
Es una cifra muy abultada, pero inferior en casi 19 millones a la de finales de febrero, porque se produjeron muchas cancelaciones de suscripciones 4G en febrero, que no compensaron ni de lejos el alza de suscripciones 5G. Muchas de estas bajas fueron debidas a los chinos desplazados y confinados por el Covid-19, aunque es probable que los operadores cancelaran conexiones que no se usan para aumentar la facturación media por suscriptores, una práctica que hacen todos los operadores del mundo.
De cualquier modo, está previsto que a lo largo de este segundo trimestre y sobre todo en el tercer y cuarto trimestre de este año aumente hasta casi el 10% el número total de conexiones 5G con respecto al total de China, lo que significaría del orden de 160 millones de suscripciones 5G. En paralelo, se prevé que el número de conexiones 4G se mantenga prácticamente estable, con un mínimo ascenso hasta final de 2020. Después, habrá un prolongado descenso de las conexiones 4G hasta 2025, en paralelo al ascenso de las conexiones 5G hasta que en 2026 se alcance la paridad entre las conexiones 4G y 5G, como muestra el gráfico inferior, extraído del informe Mobile Economy 2020 dedicado a China de la GSMA. https://www.gsma.com/mobileeconomy/china/
Como también se ve en el gráfico superior, la proporción de conexiones 4G en 2019 respecto al total es en China superior al 80%, mucho más elevada que en los países desarrollados. Esto es debido a que las conexiones de telefonía móvil eran prácticamente inexistentes en China a principios de la década pasada. Fue en 2014 cuando se produjo en China una masiva inversión en redes 4G, alcanzándose los 98 millones de conexiones, frente a las 800.000 de un año antes y a las nulas del año anterior. A principios de la década pasada, las conexiones 3G y 2G también eran muy escasas en China; de ahí que en 2017 las conexiones 4G llegaran a representar el 70% del total, cuando en los países desarrollados su porcentaje era muy inferior. China pasó prácticamente de la nada a 4G y ahora, dentro de cinco años, casi la mitad de las conexiones serán 4G y la otra mitad 5G, si se cumplen las previsiones de la GSMA, una organización que reúne a la práctica totalidad de operadores de todo el mundo.
En los próximos meses habrá smartphones 5G en China a un precio de entre 450 a 585 euros y para la segunda mitad del año se habla de modelos 5G por debajo de 260 euros
La elevada población de China, de casi 1.400 millones, hace que las cifras de usuarios de los numerosos operadores europeos móviles sean insignificantes respecto a las de los tres operadores nacionales chinos, pese a que la Unión Europea cuenta con 500 millones de habitantes. Pero lo mismo ocurre con Estados Unidos, que tiene unos 330 millones de habitantes, y Japón, con unos 130 millones. Verizon, el operador estadounidense más grande, tiene 180 millones de suscriptores móviles; NTT DoCoMo, el principal de Japón, 80 millones; Vivo, de Brasil, 75 millones, y Telcel, de México, 77 millones. Unas cifras que parecen elevadas pero reducidas frente a los 942 millones de suscripciones del principal operador chino, China Mobile. Por no hablar de los 30 millones de EE, el principal operador británico, los 35 millones del francés Orange o los 19 millones de accesos móviles de Telefónica en España. Todo ello hace que las previsiones de la economía móvil de China en 2025 sean muy gigantescas respecto al resto del mundo, como se ve en el siguiente gráfico de la GSMA, extraído como el anterior del Mobile Economy 2020 dedicado a China.
El crecimiento tan elevado de conexiones 5G en los próximos años será posible en China gracias las elevadas inversiones que prevén los operadores, así como la introducción de smartphones 5G a precio muy asequible que se producirán en los próximos meses. La semana pasada, Lenovo presentó el TCL Serie 10, un smartphone 5G que prevé vender por 3.500 yuanes, unos 450 euros. El aparato integra el chipset 765G de Qualcomm, que lo fabrica Samsung, y lleva una pantalla de 6,5 pulgadas. No es tan potente como el S20 Ultra de Samsung, que cuesta el triple con el chipset 865 de Qualcomm, ni el One Plus 7 Pro 5G, uno de los smartphones 5G más asequibles actualmente, que sale por 750 euros, pero tampoco tan sencillo como podría colegirse de la diferencia de precio. De hecho, el chipset 765G es la gran baza que tiene Qualcomm para competir con los modelos de Huawei y Mediatek, siempre que haya una pequeña merma de prestaciones respecto al 865 y una drástica bajada de precio.
La consultora Digitimes, de Taiwan, calcula que a lo largo de este segundo trimestre aparecerán muchos smartphones 5G en China que costarán entre 3.500 y 4.500 yuanes (de 450 a 585 euros) y que en la segunda mitad del año estarán muchos modelos por debajo de los 2.000 yuanes (260 euros). De hecho, Xiaomi prevé sacar en breve el modelo K30 5G de su marca Redmi de bajo coste por menos de 2.000 yuanes. Ahora, tanto en Occidente como en China difícilmente se pueden encontrar smartphones por menos de 1.000 euros, un precio a todas luces prohibitivo si se quiere que sea de uso masivo, como quiere China. Samsung acaba de anunciar un par de modelos de su gama A, los A71 5G y A51 5G, que es más económica que la gama Galaxy S, pero no ha relevado su precio ni fecha de introducción.
La buena cobertura es básica para un uso masivo de 5G. En China existen ahora unas 160.000 estaciones base 5G pero solo China Mobile quiere tener 300.000 estaciones a finales de año
El otro aspecto imprescindible para un uso masivo de 5G es tener una buena cobertura a lo largo y ancho de China. En estos momentos, existen unas 160.000 estaciones móviles 5G en 50 grandes ciudades de China, de las cuales China Mobile tiene unas 50.000. Hace unos pocos días, China Mobile anunció que prevé disponer de 300.000 estaciones base 5G a finales de este año, con una inversión total de 180.000 millones de yuanes (23.500 millones de euros), el 8,3% de incremento respecto a 2019. 100.000 millones de yuanes estarán destinados únicamente a infraestructura 5G.
El grueso de la segunda fase del concurso de suministro de estaciones móviles de China Mobile, 200.000 unidades, lo acaban de ganar Huawei y ZTE, los dos principales fabricantes chinos. Huawei se ha quedado con el 57,2% del total y ZTE con el 28,7%. Ericsson, el único suministrador occidental, ha logrado el 11,5%, mientras que un pequeño fabricante chino ha conseguido el restante 2,6%. Nokia se ha quedado fuera del contrato, cuando obtuvo una parte de la primera fase, debido a que consideró que las condiciones financieras eran muy exigentes y que la “consecución de cuota de mercado en China presentaba significativos retos de rentabilidad y la región tenía unas dinámicas de mercado únicas”. El máximo responsable de Nokia en China, Markus Borchert, ha escrito una carta abierta disculpándose por no haber acudido al concurso.
Los otros dos operadores, China Unicom y China Telecom, prevén tener a finales de este año 250.000 estaciones base, la mayoría de ellas compartidas. En conjunto, pues, China tendrá, si los planes se cumplen, un total de 550.000 estaciones base. Para 2025, se estima que dispondrán de 6,5 millones de estaciones base 5G, según se puede ver en el gráfico siguiente, extraído de la revista Beijing Review. Sólo en 5G, China Telecom invertirá este año 100.000 millones de yuan, como se ha dicho; China Unicom 35.000 millones, China Telecom 45.300 millones y China Tower 17.000 millones de yuan. La inversión total, según Beijing Review, será este año de 197.300 millones de yuan y 1,2 billones de yuan acumulados hasta 2025, sólo en 5G.
Sea como fuere, lo que está claro es que el mercado 5G chino será gigantesco en los próximos meses y años, aunque también tremendamente competitivo, tanto en cuanto estaciones base como en terminales, así como las necesarias redes troncales, las redes virtualizadas y los centros de datos alojados en la nube y en el Edge. Una infraestructura que, además, China quiere que sea rápidamente 5G Stand Alone (5G SA), cuya especificación definitiva debería aprobarse en junio, porque cada vez está más claro que la 5G Non Stand Alone (5G NSA) tiene muy poco recorrido e interés para las empresas. Todo ello en unos momentos en que Europa y Estados Unidos están lógicamente muy preocupados por el Covid-19 y la parálisis que está provocando en su economía. Los próximos años serán así cruciales.