El mercado global de smartphones caerá previsiblemente el 2,5% este año, el peor declive de la historia, según la consultora Gartner. Esto hará que las ventas mundiales de smartphones estén por debajo de los 1.500 millones de unidades, cuando en 2017 superaron ligeramente los 1.600 millones.
Varios factores explican la caída, como la falta de mejoras reales que justifiquen la renovación o que ya son nueve los trimestres consecutivos de bajada de ventas en un mercado clave como China. Pero también es atribuible a que los consumidores de smartphones de muy altas prestaciones esperan el año que viene para tener un modelo 5G.
La caída de ventas globales de smartphones en unidades no es nada nueva, pero la facturación se había más o menos mantenido gracias a la incorporación de pantallas más grandes y más memoria y al alza desmesurada de los precios de los modelos de muy altas prestaciones, especialmente por parte de Apple y Samsung. La caída del 12% de la facturación de los modelos iPhone de Apple en el segundo trimestre (y del 14% de las ventas, según las consultoras, porque Apple no ya desglosa los iPhone vendidos) revela la dura situación del mercado para los fabricantes de smartphones, aunque Apple ha maquillado las cifras con una mayor facturación de los servicios. Apple siempre ha sido el referente en smartphones.
Samsung espera un repunte de sus ventas con la reciente presentación del Note 10 y especialmente con el Fold que introducirá en septiembre, el modelo de pantalla plegable que debió retirar en abril por problemas en la bisagra que ahora asegura ha resuelto. El precio fijado, en torno de los 2.000 euros, le puede devolver algo de prestigio innovador a la empresa coreana, pero difícilmente resolverá la continua bajada de unidades de la gama Galaxy, su buque insignia, y de la caída de rentabilidad de sus smartphones.
Las ventas ya caían en unidades, pero la facturación se mantenía gracias al incremento de precios
El Galaxy S10 5G de Samsung es el modelo 5G más exitoso, especialmente en Corea del Sur, pero este año la compañía venderá solo unos pocos millones de unidades, como les pasará a LG, Xiaomi y el resto de compañías que comercializan modelos 5G. Hay que tener presente que el año pasado Samsung vendió un total de 290 millones de smartphones, seguidos prácticamente al alimón por Huawei y Apple, con 206 millones de unidades cada uno de ellos. Por muchos millones de smartphones 5G que se vendan en esta segunda mitad del año, palidecerán frente al total previsto para 2019, que rozará los 1.500 millones de unidades (aunque las cifras de las consultoras bailan porque unos cuentan unidades realmente vendidas y los otros entregadas a los operadores y tiendas).
Samsung ha logrado, en los últimos trimestres, unas ventas de smartphones muy estables, en torno a 75 millones de unidades trimestrales desde hace más de dos años, debido a su catálogo muy diversificado y a su buena relación entre precio y prestaciones de su gama media. Apple, en cambio, ha concentrado tradicionalmente su pico de ventas en el último trimestre, al rebufo de sus novedades típicas de septiembre, pero seguido con bajadas trimestrales. El resultado que obtenga Apple este cuarto trimestre revelará la profundidad de la crisis del mercado de smartphones y de la propia Apple, cuando además no tiene ningún modelo 5G previsible a doce meses vista; como pronto, para las Navidades de 2020.
Evolución ventas de smartphones por marcas (fuente: Canalys)
Mientras, el foco se centra en Huawei. La compañía china, pese al veto de Estados Unidos y sin presencia en Norteamérica, ha aumentado las ventas de smarpthones el 24% en esta primera mitad del año. Su fuerte crecimiento, del 31%, en un mercado en contracción como el chino, que encadena nueve trimestres consecutivos de ventas unitarias a la baja, justifica este aumento. El crecimiento de Huawei, lógicamente, se ha hecho a costa de sus competidores: Oppo, Vivo, Xiaomi y Apple, que han caer sus ventas en la primera mitad entre el 14% y el 20%. Samsung, como LG, apenas cuentan en China.
La incógnita es qué pasará en el mercado chino a partir de septiembre, cuando está previsto que empiecen a funcionar las redes 5G. China es un mercado de unos 100 millones de smartphones trimestrales por lo que, a poco éxito que tengan los modelos 5G en el último tramo de 2019, se pueden colocar más millones de unidades que en todo el resto del mundo con redes 5G, especialmente mientras Japón no encienda sus redes 5G. Para Huawei, China es la gran oportunidad para despegar con los equipos y terminales 5G.
En 2020, el precio de los smartphones 5G se reducirá a la mitad respecto al actual
Habrá que esperar, sin embargo, a que termine 2020 para tener una radiografía mínimamente precisa de la evolución de las redes y terminales 5G durante el próximo lustro. La consultora taiwanesa Digitimes Research prevé unas ventas de entre 100 y 150 millones de smartphones 5G durante 2020, cerca del 10 por ciento del total. Y estiman que su precio medio bajará por lo menos la mitad respecto al actual, que está por encima por encima de los 1.000 euros. Su concreción a medida que avance 2020 mostrará la realidad de la tecnología 5G en cuanto al consumo.
De todas formas, es prácticamente seguro que a partir de 2021 habrá un impulso decidido de las ventas de terminales 5G. Según la consultora Canalys, este año las ventas de smartphones 5G oscilarán en torno al 0,9% del total, de 13 a 15 millones, mientras que se prevé que el total acumulado de ventas de smartphones 5G entre 2020 y 2023 será de 1.900 millones de unidades, más que todos los smarpthones vendidos en los últimos años. El despegue se producirá a partir de 2021, cuando el 27,3% de los smartphones serán 5G y seguirá el 2022, con el 39,5%. En 2023, siempre según los cálculos de la consultora, se venderán más smartphones 5G, el 51,4%, que del resto. También Gartner estima que en 2023 las ventas de smartphones 5G supondrán el 51% del total.
Evolución ventas smartphones según tecnología (fuente: Canalys)
Los porcentajes esbozados para las ventas de smartphones 5G son halagüeños, pero habrá que esperar las cifras absolutas reales, porque un desplome serio de los smartphones 4G cambiaría el panorama, como también el precio medio de venta de los smartphones 5G, y de los 4G a partir del año que viene. El panorama, en cualquier caso, se presume muy complicado para los fabricantes y para las operadoras, deseosas de mantener, al menos, sus márgenes con el despliegue de 5G.